NO ANDO LEJANO SINO DE PARRANDA... VIVENCIAL

A quien corresponda (como quien dice, "al destinatario"):

Desde aquella vez que me sinceré en este espacio al comentar que hay diversos blogs que me provocan flojera leerlos, varios de mis habituales lectores me dejaron... Y la verdad no sé si por ese comentario o porque este blog no se queda atrás y aporta su dosis de hueva al mundo. Sí, la neta. Pa' ser ahora sincero conmigo, Mi Blogger Pechocho está sumamente descuidado... La propia inercia de hacer vida real y escribir en otros espacios, ha alejado al autor intelectual de éste, su nicho que originalmente pensó como el más libre de todos, en tanto que es el único que goza de cierta impunidad: el anonimato... Ya no escribo (aunque, la verdad, nunca lo hice) con cierta continuidad, y cuando lo hago apunto jaladas como la anterior a este post (¡una frase de una célebre chanson française, para salvar la ocasión!). Llegué a pensar en jubilarlo, pero rápidamente recapacité y admiré en su dimensión el tamaño de la pendejada que hubiera cometido: se puede dejar de escribir un blog pero desaparecerlo es como destruir una sala en medio de una fiesta estando uno bien pedo y de energúmeno. Hay que entrar en razón... Pero bueno, como este hobbie, manía, gana, gusto, necesidad de escribir en un blog -al menos en mi caso- no tiene fines monetarios y no responde a una rigurosa periodicidad, a una constante agenda temática editorial sino exclusivamente al deseo de hacerlo (cuando quiero y puedo, así de sencillo) pues seguiré con mis irregulares periodos (eso sonó como a comercial de Tampax)... Lo afirmo aquí pa' dejar constancia y porque me escribiste al mail de este blog apuntando que se me nota "un tanto lejano". Para nada. Creo que mientras más lejos de la compu esté, más cercano al mundo me encontraré... Además, cuando Mi Blogger Pechocho ya no sea tal en unas décadas y pase a ser Mi Blogger Achacocho, quiero deleitarme con los viejos y buenos tiempos.

(Aplausos)